Gran giro de volante por parte de Dicker, que pasa de la novela negra a una novela para todos los públicos, con la intención de fomentar la lectura también entre los más jóvenes. Como él mismo dice: "De las cosas que me cuentan los lectores, lo que más me emociona son las lecturas compartidas en familia, entre amigos o en los clubes de lectura. Por eso he intentado escribir un libro que pudieran leer y compartir todos los lectores, sean como sean y estén donde estén, de 7 a 120 años. Un libro con el que os entren ganas de leer y de que lean otros, sin distinciones. Y que nos permita reencontrarnos".
Es víspera de Navidad y la visita de la clase de Joséphine al zoo ha sido una catástrofe. Nadie sabe qué ha pasado exactamente y los padres de la niña están dispuestos a descubrirlo. Mientras la investigación avanza, comprendemos poco a poco que una catástrofe nunca llega sola, que las apariencias engañan y que los acontecimientos pueden tomar un giro que nadie imagina.
Una vez más, el autor consigue enganchar al lector desde el principio hasta el final, jugando con el suspense, la atmósfera y los giros del relato. Además, en esta ocasión, consigue una novela divertida y con guiños sobre cuestiones de actualidad que nos harán reflexionar a través de la mirada de los niños. Una agradable sorpresa que suma un registro más a este autor de moda.