
Cuenta la historia de un sacerdote católico (Chisholm), piadoso y apostólico, pero poco dado a las convenciones sociales. Recorre seis décadas de su vida, comenzando por el descubrimiento de su vocación, pasando por su periodo de preparación en el Seminario, su primer destino pastoral, los 30 años que pasó como misionero en China, y termina con su regreso a su tierra natal.
La historia se centra en los treinta años de misión que pasó el protagonista en una ciudad remota de China, donde inicialmente no es bienvenido. Debe comenzar una misión casi de la nada; enfrentar epidemias de hambre, la peste negra, y combates entre señores de la guerra. A pesar de la cultura totalmente diferente, logra ser aceptado y amado, gracias a su dedicación y tolerancia, ganándose el respeto y la estima de los habitantes chinos, ayudando a propagar la fe católica entre ellos.
Aunque es una novela, el libro tiene trazos de la historia en los ataques a los católicos transcurridos en Escocia a fines del siglo XIX y comienzos del siglo XX; así como en la descripción de las aldeas de los mineros; y sobre todo las realidades de China. En la narración, los personajes son retratados de una manera realista y bien hecha, resaltando los aspectos positivos e insistiendo en la responsabilidad por el bien común.
J.G. (Portugal, 2022)