Lo que parecía una broma inicial de un joven pasajero israelí, se convertirá en una noche muy larga. Al llegar el comisario de policía judicial de París, Jules Léger, a la terminal número 2 del aeropuerto Charles de Gaulle, se encuentra una situación complicada. Yaniv Meidan, el joven mencionado ha desaparecido junto a una mujer rubia vestida con una llamativa prenda roja; por medio de las cámaras de vigilancia ven como ambos se dirigen hacia un ascensor. ¿Es una broma o un secuestro? Paralelamente en Israel, en un centro de alta seguridad, no se tienen datos de un soldado allí destinado, quien pidió permiso para ir a París a casarse. En las reuniones que se derivan, se aprecia la hostilidad del general Rotelmann hacia Oriana, una teniente que sustituye al coronel Abadí, quien según fuentes solventes será nombrado jefe de varias unidades de los servicios secretos, para unificar y coordinar su trabajo. Mientras ese nombramiento no se lleve a cabo, Rotelmann pone todos los medios posibles para evitarlo. La búsqueda del joven israelí, informático de profesión, les lleva a un pozo séptico que recoge deshechos de varios lugares. Lo previsible es que el joven, para confundir su identidad haya sido asesinado y su cuerpo lanzado al interior de ese lugar. A medida que avanza la investigación, saben que el joven al que buscan se llama Vladislav y parece que está interfiriendo en una operación de venta de droga por gran valor. Su intención es lograr que el dinero que se pague en esa operación llegue a su cuenta. Entre unos sucesos y otros, varios chinos que ejercen de guardaespaldas, mueren al fallar en las operaciones que se les encomiendan. Hay una organización china que no quiere dejar testigos de sus pasos. Mientras, la discusión de competencias entre el comisario francés, Léger, y el coronel israelí Abadí, se va resolviendo mediante una colaboración mutua. La información a la prensa se procura que sea consensuada y dosificada. La novela tiene una trama compleja, si bien los nombres esenciales son pocos. El uso de información con tecnología de alta calidad y estar dispuestos a matar, es clave en la red de narcotraficantes. El comisario y el coronel participan de lo primero, pero no de lo último, en el relato. La acción es abundante y el número de muertos al final de la operación es de media docena. La corrupción aparece también en áreas colaterales, si bien no aporta especial información para la trama que relata el autor.