Continuación de "La familia Wapshot". Se mantiene el estilo comedido y elegante, junto a un fondo bastante disoluto.
D.L. (2009)
John Cheever es, sin lugar a dudas, uno de los grandes escritores estadounidenses del siglo XX; recomendables son sus relatos breves. Su retrato de la clase media en los años 50, poco después de finalizar la segunda guerra mundial, es imprescindible para entender, a base de anécdotas y situaciones personales, la sociología de la sociedad norteamericana y, algunos años después, de la sociedad occidental. La sociedad de las urbanizaciones y las casas clonadas. Este libro es la continuación de la "Crónica de los Wapshot" (1957) y, aunque carece de la frescura del primero, relata la vida de los dos hermanos trabajando fuera de su pueblo, St. Botolphs, situado en la costa este de los Estados Unidos. Cheever encuentra situaciones trágicas que trata de manera sarcástica o irónica, en ocasiones hilarante, para explicar la vida diaria de una clase social. No deja ningún tema por tratar, la depresión, la familia, el amor, la segregación racial, el alcohol, las reuniones sociales, y en este libro, más que en otros, no pierde ocasión para tratar con ironía los valores sagrados de los Estados Unidos como son la defensa nacional, el patriotismo o la religión cristiana.
F.F.C. (España, 2015)