
El cuento recoge un recuerdo autobiográfico de la infancia del autor. Se trata de una Navidad pasada junto a su padre —separado de su madre años atrás—, en una ciudad diferente de Alabama, donde él vivía con sus tías. Desde el punto de vista de un niño de seis años, se exponen dos situaciones contrastantes. La primera es el ambiente familiar de Alabama, caracterizado por la pobreza e impregnado de sentido religioso, en el que el chico es feliz. La segunda es la situación de vida del padre en Nueva Orleans, caracterizada por el bienestar material, por la inmoralidad, el rechazo de Dios y la infelicidad. Análoga a ésta es la situación de la madre, a la que hay dos referencias en el relato. Sin hacer juicios de valor de la situación de sus padres, sí emerge el rechazo natural del niño al ambiente insano en el que se mueve su padre.