Pedir la luna

[Pedir la luna]
Año: 
2018
Género: 
Público: 
Editorial: 
BibliotecaOnline
Ciudad: 
Madrid
Año de publicación: 
2018
Páginas: 
276
Valoración moral: 
Género: Literatura
Sin inconvenientes.
Algunos inconvenientes morales.
Presenta pasajes de cierta entidad contrarios a la fe o la moral.
Presenta pasajes escabrosos o un fondo ideológico general que puede confundir a personas con una escasa formación cristiana.
Abundan los pasajes escabrosos o un fondo ideológico contrario o extraño a los valores cristianos.
Por sus contenidos explícitos, la obra contraría la fe o la moral de la Iglesia Católica o el cristianismo en general.
Calidad literaria: 
Recomendable: 
Transmite valores: 
Contenido sexual: 
Contenido violento: 
Lenguaje vulgar u obsceno: 
Ideas contrarias a la doctrina de la Iglesia: 
La calificación de las distintas categorías proviene de la opinión de los colaboradores de Delibris

La autora es una reconocida escritora de libros como El Lubricán, Por donde sale el sol y La puerta de los sueños. En esta novela inicia la Trilogía del Tercer Milenio, que aborda las relaciones personales y familiares contemporáneas con realismo y con hondura: la amistad, las relaciones de pareja, el trato entre padres e hijos cuando estos se hacen mayores, etc. Para esto, escribe una historia donde narra las relaciones de vecindad en un inmueble situado en el barrio de Salamanca en Madrid, en la Calle Pintor Morales, 25, mostrando los intereses y preocupaciones, las alegrías y penas de unos y otros vecinos.

La protagonista de la novela es Costanza Morales, joven profesional que viene a la capital para trabajar, huyendo de algún modo de la casa de sus padres en Sevilla, después de un desengaño amoroso. Ella es también la narradora de la historia. La novela discurre con agilidad por los abundantes diálogos, modo habitual de la autora para presentar personajes y hacer avanzar la trama. Con estos elementos y con una cuidadosa elaboración de las conversaciones, que fluyen como la vida misma, y una inteligente dosificación de la información al lector, la historia avanza y atrapa.

Los personajes están bien perfilados, y se presentan a cabalidad, con sus aciertos y problemas. La autora se esfuerza en mostrar el bien como bien y el mal como mal: hay una visión de fondo de la persona y lo que la hace alcanzar la plenitud con matriz de antropología cristiana. Hay personas que acuden a Dios y rezan por sus problemas y le agradecen los dones que reciben; hay personajes generosos, de gran talla humana, y otros con comportamientos egoístas, cuya actitud produce rechazo, aunque siempre hay un esfuerzo por separar a las personas de sus actitudes. 

El tiempo de la novela son siete meses, los últimos del año 1999 y los primeros días del año 2000. En este ambiente aparecen los temores y expectativas ante el cambio de milenio. La mirada femenina de la autora aporta color y realidad al fijarse en los modos de vestir y aspecto de los personajes, el mobiliario de las habitaciones, las compras en tiendas, los menú y la preparación de las comidas y cenas, y los rasgos del carácter que se resaltan en los diálogos. 

En la novela, la joven protagonista crece y madura con las adversidades, durezas y alegrias de la vida, y de algún modo también se puede entender como una novela de aprendizaje. El final es abierto a unas posibilidades que llenan de esperanza a la protagonista, pero entiendo que esta novela seguirá en las otras dos entregas que se anuncian en el encabezamiento. 
 

Autor: José Ignacio Peláez Albendea, España
Fecha de actualización: Nov 2018