
El autor, doctor en filosofía, ensayista y profesor, hace un diagnóstico certero sobre este aspecto de la sociedad actual. Repasa las ideas que están en la base de esa ética borrosa y muestra sus manifestaciones, que también afectan a la filosofía, de la que depende la ética.
Siendo esto cierto, se echa en falta un capítulo para ayudar al lector a salir de esa niebla que impregna el ambiente; algunos lo llaman dictadura del relativismo o sociedad líquida, etc.
La segunda parte la dedica a lo que llama la ética del silencio, en donde, junto a evitar el ruido que nos envuelve, señala que es deseable cultivar la reflexión, la serenidad y la escucha. Cierto, pero insuficiente.
Como el autor ha escrito otros libros, quien lo desee podrá ver pistas para clarificar la vida ética. En este libro hace consciente al lector de la situación y, en otros libros, muestra modos de vida acordes con la dignidad de la persona.