
Este libro es una llamada a la esperanza. Somos libres, a pesar de las circunstancias adversas que nos pueden rodear e influir. Y no sólo tenemos el derecho, sino también el deber de ejercer nuestra libertad, precisamente en este mundo sutilmente tiranizante en que nos ha tocado vivir. Nadie está llamado a ser un "autómata" sin rostro.
Todo hombre puede ofrecer al mundo muchas sorpresas, aportar pensamientos nuevos, soluciones originales, actuaciones únicas. Es capaz de vivir su propia vida, y de ser fuente de inspiración y apoyo para otros.
Sólo cuando comprendemos lo esencial, empezamos a ser libres. Solo siendo y sintiéndonos libres podemos amar. Jutta Burggraf fue una mujer profundamente libre, valiente, feliz y enamorada. En este libro nos ha dejado una hoja de ruta formidable para hacer de nuestra vida algo extraordinario, una aventura apasionante proyectada hacia la eternidad.
L.P. (Italia, 2017)