Este volumen es la edición completa de todos los relatos cortos o cuentos de Nikolái Gógol (1809-1852); resulta una obra excelente para conocer la temática y el estilo del escritor ucraniano. Aunque su obra culmen es Almas muertas y se dio a conocer con la obra cómica El inspector , estos cuentos ya le consagraron como escritor. También hay que tener en cuenta que Gógol, al ser un escritor profesional, publicaba obras que tuvieran demanda en el mercado. Gógol es un escritor ruso, ya considerado clásico, que transformó la literatura, en el sentido definitivo de que esta tomaría su dirección en los ciento cincuenta siguientes años
Los relatos abarcan los primeros cuentos de Ucrania que recoge temas folclóricos derivados del teatro de marionetas y de la tradición oral o leyendas fantásticas. Gógol, que nació y vivió en Ucrania hasta los diecinueve años, puso sus tempranas impresiones en estos cuentos. En cartas a su madre, le pidió que le describiera costumbres, vestidos, supersticiones y antiguas historias que son la base de sus cuentos . Son cuentos de esta tierra, denominada también la "Pequeña Rusia", que ofrecen una perspectiva realista y sarcástica de la vida del campo. Esta selección de relatos titulada Los cuentos de Ucrania o Veladas en un caserío de Dikanka fueron escritos entre 1831 y 1832, y aparecieron en diversas revistas, publicándose en forma de libro más tarde. Es una obra rompedora y forma el núcleo del estilo: su sentido de lo macabro, lo humorístico y sarcástico que combina con descripciones de enorme belleza. Estos escritos ya muestran su capacidad literaria y con ellos llamó la atención de Pushkin. Se divide en dos volúmenes, con cuatro historias cada uno: la Primera parte la constituyen La feria de Soróchintsy, La noche en vísperas de San Juan, La noche de mayo o la ahogada y La carta perdida. La Segunda parte contiene La Nochebuena, Terrible venganza, Iván Fiódorovich, Shponka y su tía y El embrujado
En La feria de Sorochín un gitano aprovecha las supersticiones sobre el diablo para casar a una joven con su enamorado y que le vendan por nada una serie de bienes. En La noche de mayo o La ahogada, una joven esposa descubre que su madrastra es una bruja y dice Gógol: “Las viejas han inventada que, a partir de ese día, todas las ahogadas salen las noches de luna al jardín del capitán a calentarse bajo la luz del plateado astro y que la hija del capitán es quien las encabeza. ¡Como para creerles a las babas!". En La Nochebuena todo está listo pero el diablo decide robar la luna, dejando la aldea a oscuras. Algunos extractos del cuento Iván Fiódorovich, Shponka y su tía dan idea del tono de la narración: al principio dice que no sabe cómo termina –“Tuve que imprimir la historia sin final. En cualquier caso, si alguien (…) sólo tiene que llegarse hasta Gadiach y preguntar por (…)”–; y más adelante dice que “para mostrar mejor al lector el grado de instrucción que reinaba en el regimiento de infantería de P***, añadiremos que dos oficiales (…), capaces de apostar el uniforme (…) e incluso la ropa interior (…) “. En Terrible venganza narra cómo cuando se celebra la boda del hijo del jefe de cosacos, no acude el padre de la novia.
El segundo bloque lo constituyen los relatos o cuentos sobre Mirgorod (1835) que está formada por cuatro narraciones que reflejan la diversidad del genio de Gogol: Terratenientes de antaño es una mirada nostálgica de una hacienda rural, de un viejo matrimonio, ocupado solo de comer y beber. Vií es un cuento de terror, lleno de elementos terroríficos y espectrales, basado en una leyenda acerca de un ser maligno cuyos párpados llegan al suelo. El argumento nos muestra la condena de un inocente, al que se le reprocha haber tenido un sentimiento de miedo, que un cosaco nunca debe tener. El desprecio y la humillación que aparecen en algunos de los cuentos de Gógol ya estaban en El sepulturero de Pushkin (1830) y están en el origen de la disputa absurda y grotesca de Por qué discutieron Iván Ivánovich e Iván Nikíforovich de 1835. Gógol hace un sofisticado ejercicio de ironía y, en vez de una estampa pintoresca, desarrolla una pieza precoz de teatro del absurdo. Gogol advierte al inicio que todo lo que cuenta ocurrió hace mucho tiempo (se supone que para evitar la censura).
Tras un periodo como profesor de la Universidad de San Petersburgo, Gógol escribe unas historias (1835-1852) en las que explora un realismo fantástico y surrealista mezclando el humor con formas de prosa novedosas. Estos relatos le dieron mucha fama. Ya emigrado, en Roma terminó El capote, este cuento junto con La nariz,El retrato, La avenida Nevski y Diario de un loco conforman este libro. La avenida Nevski es una novela compuesta por dos relatos paralelos, que cuentan dos historias de amor. Los hechos se desarrollan en esa avenida de San Petersburgo. En El Diario de un loco relata la historia de un burócrata que escribe en su diario su descenso a la locura. El capote (1842) cuenta la historia de un funcionario que trabaja como copista pero necesita un capote nuevo y en esto gasta sus ahorros. Cuando al fin lo consigue, un ladrón se lo arrebata y la policía no hace nada. Muere de frío y su espectro vaga por las calles. La nariz (1836) trata de un hombre que advierte que ha perdido su nariz pero se la encuentra por la calle, descubre que tiene vida propia y que incluso ha alcanzado un estatus social más alto que el suyo.
El uso de elementos fantásticos parece ser que era una manera de burlar al censor y este simbolismo también la utilizaron en el siglo XX algunos de los mejores escritores soviéticos pero aun así, Gógol emigró a Europa. También se reúnen en este volumen textos y fragmentos de narraciones inconclusas.