
Fantástico descubrimiento. Divertida novela de aventuras juveniles cuyo tema de fondo son las relaciones padre-hijo. De hecho, es un libro que podría ser más bien para padres, aunque no lo parezca.
Liam Digby es un chico de doce años muy desarrollado para su edad: además de ser superdotado es muy alto, se afeita ya todos los días… y tiene pinta de adulto, cosa que aprovecha para meterse en un lío tremebundo en un viaje espacial organizado por una empresa china… Es un disparate muy divertido, con grandes temas de fondo que resuelve bastante bien.
Los personajes y el ritmo son muy buenos y están muy bien llevados. Lo recomiendo vivamente para jóvenes y mayores. Interesante para un libro-fórum.