
Robert Hugh Benson, antiguo sacerdote anglicano, narra su conversión al catolicismo. Al ser el hijo del Arzobispo de Canterbury, este hecho causó bastante polémica en Inglaterra. En su testimonio, confiesa que llegó a la Iglesia ciego, mudo y miserable, atraído únicamente por el brillo de la estrella de la fe. Benson narra como enfrentó sus prejuicios intelectuales y emocionales, además de las dificultades externas que tuvo que afrontar para poder seguir el camino que, en conciencia, sabía que era el único correcto.
Profundamente inglés, presenta gran cantidad de detalles sobre sus contemporáneos y sobre los problemas históricos y doctrinales de las relaciones entre católicos y anglicanos que pueden desconcertar a algún lector con menos formación. Pero vale la pena conocer el recorrido de Benson. El autor murió con sólo 43 años, dejando varias obras literarias, y un libro de oración: La amistad con Cristo. Un buen libro, para cualquier persona.