
Conocer la revolución francesa es conocer la historia de nuestro tiempo. Schama, historiador de éxito, hace un profundo recorrido por la revolución que marcó el nacimiento de la edad moderna; presenta la situación en los últimos años de la Francia de Luis XVI, la toma de la Bastilla y sigue con los cambios sociales y políticos de un país que se despierta en una república. Fueron intensas las reacciones “contrarrevolucionarias” y el proceso de descristianización, con una Iglesia traicionada y dividida, para entrar en el periodo de terror cuando todo sospechoso, amigos y enemigos, con sentencia dictada antes del juicio o por ser aristócrata o católico, sin juicio, eliminados de la manera más cruel.
Schama realiza un trabajo ingente, con una objetividad y claridad alejada de cualquier pasión, le interesa buscar las causas de los acontecimientos más que profundizar en las biografías. Con ello construye un bosque de personajes y acontecimientos, con algún momento árido, pero generalmente los capítulos resultan apasionantes e invitan a no dejar la lectura. Vivir la revolución francesa es comprender las trágicas revoluciones sufridas en el siglo XX, entrever la personalidad, a veces psicopática, del político revolucionario y conocer cómo se manejan las masas en la dirección que le conviene al poder.